lunes, 5 de octubre de 2015

SÁBADO: TOUR A OTAVALO, COTACACHI Y LAGO SAN PABLO

Nos sorprendió positivamente la gran cantidad de colegas filatelistas (temáticos, en particular), de otras partes de América, que optaron por ampliar su período de estancia en Quito para poder disfrutar del paseo a las ciudades de Otavalo y Cotacachi (Provincia de Imbabura), con derecho a un almuerzo en un bellísimo restaurante en la orilla del Lago San Pablo, con una vista, “de película”, del volcán Imbabura.
 
Salimos temprano rumbo a esas localidades norteñas, disfrutando de un bonito viaje en la compañía de las siempre atentas Janet y Belén, esposa e hija del Presidente de la AFE, Teddy Suárez, quién debió permanecer en Quito para supervisar el desmontaje y entrega de colecciones a los comisionados.
 

Janet y Belén Suárez, eficientes acompañantes

Mientras seguíamos camino, el guía turístico nos fue explicando distintos aspectos históricos, geográficos, culturales, etc., asociados a las zonas a ser visitadas, de manera que el viaje “pasó rápido”, como se suele decir.

La primera parada fue en la ciudad de Otavalo, donde pudimos conocer y pasear por la famosa feria a cielo abierto que caracteriza ese destino turístico ecuatoriano, siempre visitado por personas del extranjero y nacionales.
 
 

Aspectos de la Feria de Otavalo

Es una feria en la que se vende de todo, desde productos agropecuarios (y sus comidas derivadas), hasta otros de la artesanía y la industria otavaleña.
 

 En la feria

No es necesario decir que el bus retornó a Quito “más pesado, con las compras (tanto en diversidad como en abundancia) hechas por nuestros colegas excursionistas.
 

Diana, Ricardo y Marcela, con sus compras

Enseguida tomamos rumbo hacia la ciudad de de Cotacachi, caracterizada por su tradición musical y por la industria basada en el cuero. Y por ahí también se compró de todo: cintas, carteras, bolsos, chaquetas, etc. Siempre con un buen regateo (que es parte de la cultura local), ya que se dice que “el buen negocio es aquél que le agrada a ambas partes: comprador y vendedor”.
 


Vistas de Cotacachi

El cierre  del paseo – y, de cierta forma, de los aplacibles días pasados en Quito – fue con un almuerzo en el restaurante Puerto Lago, degustando platos típicos de la culinaria local, con opciones según el gusto de cada uno.


Una de las mesas del almuerzo
 

 

Restaurante Puerto Lago

Y al final, para que quedara como un recuerdo más de esta fiesta de la filatelia interamericana, se tomó una foto “de despedida”, con todos los turistas-filatelistas reunidos, y teniendo por fondo el imponente volcán Imbabura.
 


Foto de despedida

Bueno, estas fueron unas breves crónicas sobre cada día de actividades en Quito. Ahora regresamos a nuestras casas con muchas cosas más por recordar y comentar en los días que se siguen.

¡Gracias, Quito!, ¡Gracias, AFE!, ¡Gracias, amigos filatelistas ecuatorianos! ¡Y hasta una próxima!